Por Dziga.

Pregúntenles y pregúntese.

Este próximo 23 de enero se conocerán las y los candidatos a “convencionales”.
Tal como lo hemos expuesto, en variadas ocasiones y en todos los espacios a los que hemos podido llegar, este proceso es parte de un diseño, del que estamos convencidos es una puesta en escena para cambiar las cosas y que nada cambie. Es un espectáculo pactado por la institucionalidad de un sistema que, lo único que tenemos claro, es rechazado por una gran mayoría de los sectores populares y marginados.
También reconocemos que un gran número de la población tiene esperanza (aun cuando ha sido traicionada tantas veces) en que este es un proceso en el cual puede influir y ser oídos, como honrosas excepciones de candidatos que, honestamente, cree que pueden marcar alguna diferencia.
Pero no nos perdemos, mientras todo gira entre candidaturas y representación, por cierto lo más lejos posible de la participación popular limitada solo a un acto electoral de votación, se aprueban o se presionan “leyes de amarre” como las de Pinochet.
OPAL en la plataforma de videos Odysee
Usted, que es parte de aquellas y aquellos honestos y esperanzados, y cree que es necesario la construcción de otro orden político y social, de una sociedad de derechos, de solidaridad, de empatía, de colectivos.
Usted, que ha estado en la calle exigiendo derechos y cuestionando la institucionalidad.
Lo invitamos a preguntarles a todos esos candidatos, que iniciarán sus millonarias campañas y representarán sus propias voces y sus propios intereses, a que se pronuncien sobre algunos temas que creemos son medulares para el mismo proceso convencional, pues usted no tiene espacio ninguno de participación real. Su opinión está arrojada a la voluntad de esos posibles “convencionales”.
La sangre derramada y la vida arrebatada
“Es mejor morir luchando por la libertad
que ser prisionero todos los días de tu vida”
Bob Marley.
Pregúnteles a los candidatos que se manifiesten claramente en torno a los muertos de la Revuelta.
Pregunte por la investigación y la sanción a los Agentes del Estado involucrados materialmente así como a los responsables políticos de las mismas.
Cuestione a los candidatos.
¿Y los independientes?
¿Qué es ser independiente?
¿Qué garantiza ser independiente?
Ser independiente es solo no estar afiliado a un partido político mas, hay independientes de todos lados, por lo tanto, a los sectores populares esa independencia les es indiferente.
Ser independiente no significa que representará propuestas de los sectores populares, no significa que lleve propuestas de asambleas populares deliberantes constituyentes, no significa que se pueda ejercer control popular en cuanto a su participación y remoción si no cumple con los deseos de sus electores, en definitiva, ser Independiente no tiene valor en si mismo.
Por otro lado, ya sabemos de otras posiciones de los partidos sistémicos que siempre se han representado a si mismos y sus propios intereses.
De los candidatos de las Derechas, usted ya sabe cuál es su posición. Son cómplices de las políticas represivas del Estado, usted ya sabe, avalan y justifican todas las violaciones de derechos fundamentales de los seres humanos. NO están dispuestos a cambiar y protegerán con las fuerzas militares del Estado, si es necesario, este sistema de privilegios del cual usufructúan.
La Concertación, con una definición socialdemócrata o socialcristiana, ha sido y son administradores del mismo sistema del cual usted ha dicho ¡¡Basta!!, hasta el cansancio. Son servidores al poder de dominación de clases, devenidos en clase política, testaferros de una democracia de ricos y señores del capital, ungidos en demócratas criminales, cómplices durante treinta años de la muerte de decenas de jóvenes luchadores sociales.
¿Podrían arriesgar sus privilegios?
Frente Amplio, hijos bastardos de la concertación, dispuestos y solícitos a dar señales de buena conducta. Así participaron del “Acuerdo” y así votaron Abstención a las Leyes Represivas que permitieron su dictación.
El PC y FRVS, no firmaron el Acuerdo sin embargo, participaron de él. Se Abstuvieron en la votación de las leyes represivas.
Si usted participa de este espectáculo político, con toda honestidad y fe en que este proceso cambiará algo.
Pregunte y pregúntese.

No olvidemos, jamás olvidemos a nuestros muertos, quienes regaron con su sangre y plantaron con su vida, la semilla de una nueva resistencia popular.
Pregúnteles y pregúntese.
¿Es legítimo un “proceso convencional” cuando, aún no hay juicio ni castigo en los casos de las personas muertas, en los que, incluso hay cuerpos sin identificación?
¿Es legítimo este proceso cuando, en la mayoría de los casos, aparecen como responsables Agentes del Estado?
Pregúnteles y pregúntese.
¿Qué dicen o qué posición tienen con los más de 400 mutilados o los miles de baleados durante la revuelta?
Pregúnteles y pregúntese.
¿Qué van a hacer por los cientos Gustavo Gatica o las cientos Fabiola Campillai?
¿Qué harán para castigar a los responsables materiales y políticos de estos crímenes?
Aaaaaaah, ¿que no pueden, que no tienen facultad, que no son electos para ello?
Entonces, ¿qué Legitimidad tiene un proceso que se construye con la sangre y mutilación de cuerpos y un sistema de Representación que es el mismo que ha sostenido este Orden que todos cuestionamos?.
Qué Legitimidad tienen aquellos que guardan silencios para “representar” el grito del ¡¡Ya Basta!!.
Qué legitimidad tienen para “representar” cuando en la calle exigíamos PARTICIPAR.
Pregúntenles y Pregúntese.
¿Qué dicen de los Prisioneros Políticos? De todos los prisioneros políticos secuestrados en la cárceles del Estado por luchar contra el sistema.
Esos que los partidos del sistema, algunos (los de “izquierdas”), llamaron en algún momento Presos Políticos y hoy, en complicidad con los medios canallas de desinformación, llaman delincuentes.
Pregúntenles y Pregúntese.
¿Qué legitimidad tiene este proceso que se articula, con jóvenes, mujeres, hombres y niños secuestrados, arrebatados de sus relaciones sociales, por exigir en la lucha sus legítimos derechos?
Pregúntenles y pregúntese.
Sí, usted que quiere ser parte de un cambio social profundo.
No comulgue con ruedas de carreta.
Pregúntenles y pregúntese.